Hace unos días conversando con un amigo, este me preguntaba que es realmente la innovación. Se me ocurrían un montón de explicaciones al respecto, todas diferentes, todas posibles, pero ninguna concreta. Es como cuando te preguntan que definas algo con lo que convives habitualmente y tienes asumido lo que es, pero no lo consigues como definir exactamente. Define «filosofía» por por ejemplo.
Mi amigo, muy inteligente, me dio también un montón de explicaciones y definiciones de innovación. Me di cuenta de que todas, absolutamente todas, se referían a innovación de producto. Entonces comprendí que este gran error de apreciación no era solo de mi amigo, sino que este error estaba también en la forma de entender y de actuar de las empresas, limitándose exclusivamente a innovar en el producto, cerrando así una gran cantidad de oportunidades a su empresa.
Si la organización de una empresa aceptara y comprendiera que la innovación no está solo en el desarrollo y la presentación del producto, sino que además puede estar también en la propia organización, en el marketing, en las ventas, en la producción, en la contabilidad, en los procesos, etc, sería entonces cuando una empresa tendría abiertas un montón de oportunidades y puertas diferentes, y no solo una.
INNOVACIÓN: «Innovación es la aplicación comercial o industrial de algo nuevo – un nuevo producto, un nuevo proceso o método de producción, un nuevo mercado (…), una nueva forma de vender, un nuevo negocio o una nueva organización. – Joseph Shumpeter -.
